Me recomendaron el libro y pensé, ¿por qué no? Tenía tiempo para leer y ganas de hacerlo, así que me enfrasqué en la lectura de El tiempo entre costuras de María Dueñas.
Al principio la historia me pareció algo insustancial, hasta que Sira, la protagonista conoció a Ramiro Arribas y la narración empezó a ser mucho más ágil. El estilo elegante de la autora le concedía a la novela una lectura amena e incluso interesante. No sé si llegaba a ser un folletín pero sí se parecía un poco. La historia de amor con Ramiro Arribas provocó la separación física y personal con su madre y acabó con Sira en Tetuán, abandonada y con grandes deudas a las que tuvo que hacer frente. Con la ayuda de Manuela, su casera, y negocios algo más que censurables, consiguió reunir dinero suficiente como para montar un taller de alta costura. La suerte empezaba a sonreírle. Gracias a su trabajo en el taller Sira pudo hacer frente a sus deudas y empezar una serie de relaciones sociales que darán mucho ritmo a la narración. Sobre todo un personaje crucial será Rosalinda Fox, su amistad con ella permitirá al lector contemplar el panorama histórico en el Protectorado español en Marruecos durante la guerra civil española. A través de sus contactos, es decir, de su amistad con Rosalinda Fox conseguirá que su madre pueda viajar a Tetuán en plena Guerra Civil y conocerá al intermediario de este hecho, Marc Logan del que se enamorará perdidamente, aunque no será hasta el final de la novela donde veremos el desenlace de este amor. Un favor se paga con otro favor porque sino no tiene sentido que una modista de alta costura pase a formar parte de la lista de espías ingleses. No queda muy claro el motivo, al menos para mí, ya que pedir un favor para que traigan a tu madre para estar con ella y después irte a Madrid, dejándola sola en Tetuán, para trabajar como espía para los ingleses, no parece muy lógico. Pero la narración vuelve a coger un ritmo interesante cuando estando en Madrid la envían a Portugal en una misión de alto riesgo. Este momento de la historia posee todos los ingredientes de una intriga bien hecha. Pero cual es mi sorpresa cuando de repente acaba la historia, de forma rápida y torpe. En Portugal se reencuentra con Marc Logan, y poco después termina la novela.
Es una novela bien escrita, pero con poca profundidad, se queda en la superficie de todo, no profundiza ni en el momento histórico que describe ni en la psicología de los personajes. Te queda una sabor de boca a pudo ser y no fue, pero el tiempo leído nunca es tiempo perdido.